Hay tipos a los que oyes hablar y, por lo que dicen, uno acaba
pensando que son capaces de “comerse el mundo”.
De tal forma hablan en cuanto a lo que ellos harían en una gestión, en un
negocio, encomiando, sin tasa, sus propias dotes y preparación, que uno acaba
pensando: “Este es el hombre fenómeno, el
verdadero gestor que nos estaba haciendo falta” y, si además, uno está
deseando invertir algo en un negocio, se lanza a ello sin andar pensándolo.
Mi amigo Benito era un tipo de éstos, hasta el punto de que yo llegué
a creer, de buena fe, en sus dotes como las creyeron algunos otros más que
depositaron su confianza y su dinero —aunque fuera poco— en una de estas
entelequias que él tenía pensadas. Resultó que como el amigo Benito no tenía ni
idea del negocio montado —aunque labia no le faltaba— ni preparación para
llevarlo a cabo, aquello fracasó rotundamente, siendo el propio Benito el
primer asombrado.
Algo de esto creo que nos ha pasado a todos con los socialistas. En la
oposición parecía que iban a comerse el mundo y, como eran los que más
reclamaban los votos para poder hacerlo, convencieron a muchos en darles ese
margen de confianza. Se crearían 800.000 puestos de trabajo, se ofrecía la
experiencia de cien años de honestidad, se haría trabajar a todo el mundo,
viviríamos mejor y, como lo único que se pedía era el voto, se les dio y nos
viene pasando con ellos como con mi buen amigo Benito, que una cosa es ver los
toros desde la barrera y otra diferente el lidiarlos. Los 800.000 puestos se
convirtieron en 800.000 camelos, la gestión municipal va de mal en peor, los
servicios se abandonaron y no aparece por ningún lado la “varita mágica” de que
tanto presumían. No quiero ceñirme más que a lo local y decir que, con su gestión,
no han creado nada, sino que vienen estropeando, con unas modificaciones
absurdas, lo poco que se había creado. Cierto que algunos de ellos viven mejor,
pero la mayoría vive peor y sin horizonte de que esto mejore.
¿Cuánto nos va a costar su aprendizaje?, es lo que nos preguntamos, o
bien: ¿Va a pasar como con Benito, que vamos a tener que cerrar el negocio, sin
poder hablar de timo porque, en realidad, nos hemos timado solos?
Diario HOY, 12 de enero de 1984
Esta “Ventana”
fue replicada por el socialista Manuel Veiga López utilizando una jerga “cheli” impropia de quien firma, no a
título personal, sino en su condición de “presidente
de la Excma. Diputación Provincial”, réplica publicada en el diario de tres
días después, el 15 de enero.
La réplica del Sr. Veiga fue, a su vez,
replicada por numerosos lectores del periódico, de la que solo recogeremos dos
muestras.
Fernando no contestó a la “carta abierta” del
Sr. Veiga, aunque hizo una somerísima referencia a la misma al final de la
“Ventana” publicada el 18 de enero bajo el título de “Pepe, el mono”.
Carta abierta a don Fernando García Morales,
autor del artículo “El timo de Benito”,
escrito en la sección del periódico HOY el día 12 de los corrientes, titulada “Ventana a la ciudad” y dirigida a hacer
propaganda barata en contra del PSOE y de los cargos públicos.
Señor García Morales:
¡Jo! ¡Te has pasado, tío! Tu artículo es
intolerable, miope, desinformado, y de un terrorismo periodístico que apesta.
Oye, tío, que no te enteras: que aquí se está
haciendo el cambio a pesar de las fuertes presiones en contra. Que aunque no
hemos hecho todo todavía, estamos poniendo un orden radical a los asuntos
públicos ante tanta corrupción y tanto “cachondeo”
como el que nos hemos encontrado en las corporaciones.
¡Entérate! Ven a la Diputación y a otros
muchos sitios e investígalo, porque hallarás muchas cosas para contar a los
lectores…
¡Macho, tienes que reconocer que te has “pasao” en un artículo sin estilo,
absolutamente injusto e —repito— intolerable.
Apúntate un palito en contra, porque te lo
mereces.
Manuel Veiga López
Presidente de la Excma. Diputación Provincial de Cáceres
Cáceres, 16-01-1984
Fernando García Morales:
He leído con asombro y algo de guasa el escrito que te dirige ese
individuo que por desgracia para la provincia es el Presidente de la
Diputación. Ni que decir tiene el “cachondeíto”
que hay montado con la cartita.
Veiga parece no conocer lo que es la libertad de expresión y la tan
manoseada TOLERANCIA. Además, firmando tan pomposamente (Excelentísima… será
para impresionar) ha hecho un gran daño a la Diputación como institución y a la
Provincia como colectivo.
Te escribo para darte ánimos tanto a tu compañero Marciano como a ti
para que desde tu ventana sigas
enseñando cosas y datos sobre Cáceres como poniendo las cosas claras a
esta ciudad, a esta provincia y a esta región.
Y a Veiga ni caso, que el que se pica… ¿
Con la verdad a todos lados. ¡Ánimo Fernando!
Saludos
Jorge
Alcántara
Se ha
pasado el presidente.
Esta carta pretende comentar la contestación
(publicada en esta sección) de don Manuel Veiga López, presidente de la
Diputación de Cáceres, al artículo de don Fernando García Morales, publicado el
día 12 del corriente, titulado “El timo
del Benito”.
Don Fernando García Morales realizó en su
artículo un repaso de la política socialista durante su primer año de Gobierno,
indicando las divergencias entre prometido y cumplido que a su juicio se habían
producido. Podrá estarse o no de acuerdo, pero en cualquier caso hay que
admitir que los términos empleados en la crítica son en todo momento correctos
y muestran una educación propia de periodismo escrito.
El señor presidente de la Diputación de
Cáceres, en carta publicada el día 15 del corriente, manifiesta su
disconformidad con la crítica realizada por don Fernando y tiene derecho a
ello, pero hay formas y formas de mostrar una opinión en contra. Se limita
únicamente a emplear términos descalificadores, tales como tío, miope,
terrorista… y termina diciendo “macho te
has pasao”.
Señor presidente, rebata la opinión de quien
le critica y emplee argumentos para ello, pero por favor, no utilice un
vocabulario impropio de quien ostenta un cargo público. ¿O es que habla usted
así en los plenos de la Diputación y llama tíos a los diputados y les dice
machos que os habéis pasao? ¿Es usted un pasota?
Rafael Sánchez-Ocaña Clavijo
Plasencia
Leo la carta abierta del señor Veiga López contestando al señor García
Morales y creo que el lenguaje que emplea es grosero e impropio de una persona
(que se entiende es) educada, y menos de un representante de la Excma.
Diputación de Cáceres.
Entiendo que si opina que el señor García Morales está equivocado, hay
otras formas de expresar un desacuerdo.
Ese señor sí que “se ha pasao”
empleando esas frases hechas más propias de los “pasotas” que de un presidente de Diputación.
Mª Teresa Puig Alcantud
Maestra nacional
Caminomorisco
(Cáceres)
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