En memoria de un gobernador

Víctima de un infarto, ha fallecido en Galicia el que fuera gobernador civil de Cáceres, por menos tiempo, y más popular y querido de todos los cacereños: José Luis de Azcárraga y Bustamante. Su personalidad y su entrañable cariño al Cáceres en el que estuvo sólo ocho meses, bien merece que le recordemos aquí. Sólo hubo otro gobernador que duró menos, Leopoldo Sousa, que lo fue sólo dos días de marzo, pero eran tiempos de guerra, en 1937.

Azcárraga, en el corto espacio de tiempo que estuvo en Cáceres se metió, por carácter y cariño, a todo Cáceres en el bolsillo y quizás envidia por esta popularidad —que no iba con los tiempos aquellos de 1960— fueran la causa de que lo trasladaran, en contra de su propia voluntad. Vino a sustituir a Licinio de la Fuente, que había sido gobernador del 56 al 60, al estilo tradicional del “ordeno y mando” de aquel entonces como fueron todos los gobernadores anteriores. Azcárraga rompió con todo aquello. Él se iba a hacer deportes a la Ciudad Deportiva, montado en bicicleta y sin ninguna escolta. Hablaba con todo el mundo y se afeitaba y arreglaba el pelo en una barbería próxima al Gobierno Civil, cuanto todos los gobernadores de antes —y aún después— recibían al barbero en casa. A cuenta de ello le ocurrieron anécdotas graciosísimas, como la de un compañero de barbería al que le habían multado e, indignado, insultaba a todas las autoridades, sin saber que él era el gobernador civil.

El caciquismo de siempre, por temor a que descubriera algún trapo sucio, convenció al “alto mando” de que él mismo deseaba ser trasladado, y éste traslado fue un día de luto para Cáceres donde una muchedumbre, agarrada al coche oficial, quería impedir su marcha.

El mismo Azcárraga tuvo que hablar, con lágrimas en los ojos, para que le dejaran marchar. Ahora el Cáceres actual, aunque con gente nueva, también siente su muerte.

Diario HOY, 2 de agosto de 1985

Nota.- Aunque Fernando no lo cuenta en su “Ventana”, hemos de agregar que José Luis Azcárraga Bustamante fue el autor de la famosísima novela “BOTÓN DE ANCLA”, que sirvió de fundamento para la realización de tres películas muy populares que llevaron ese título, en las que participaron Fernando Fernán Gómez, el Dúo Dinámico y hasta Miguel Gila. La novela fue publicada en 1947 durante su periodo como profesor de la Escuela Naval Militar de Marín, inspirada en la vida y anécdotas de los guardiamarinas.

Fue miembro del Cuerpo Jurídico de la Armada, donde alcanzó el empleo de Ministro Togado de la Armada (asimilado a Vicealmirante); Inspector General del Cuerpo jurídico de la Armada y Asesor Jurídico del Cuartel General de la Armada.

Fue, igualmente, miembro de honor del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y jefe de la Sección de Derecho Marítimo del Instituto Francisco de Vitoria.

Además ocupó a lo largo de su vida otros cargos, la mayoría relacionados con el mar o la marina, fue presidente del Sindicato de Marina Mercante, gobernador civil de Lugo, profesor de derecho internacional de la Universidad de Alcalá de Henares y asesor jurídico del Ministerio de Defensa. (Nota de Teófilo Amores)