martes, 20 de febrero de 2018

Don dinero y la campaña


Los pies fríos y la cabeza caliente hemos sacado, en líneas generales, de esta campaña electoral los ciudadanos de a pie que nos hemos “tragado” todas las cosas que los aspirantes de cada partido nos han dicho reiteradas veces a través de ruidosos altavoces: papeles y carteles por todos sitios, en la prensa, en la radio y en la televisión (cuando les han dejado). Ustedes cambian las caras, o las listas, y aplican lo dicho o escrito por todos a otras formaciones que no son las suyas, y vale perfectamente porque, en líneas generales, todos dicen cosas parecidas o similares: “que si vienen nuevos tiempos”, “que si las cosas hay que hacerlas bien”, “que tienes que llevar imaginación a tu ayuntamiento”, “que su partido avanza”, etc. Ni uno solo de los aspirantes ha concretado lo que piensan hacer, aparte de cobrar el sueldo, una vez que estén cerca del mango de la sartén y esto es muy sospechoso.
A mí, un entendido, me indicó cómo se hacen las campañas electorales por parte de los partidos de implantación nacional encargándoselas a unos profesionales de la publicidad y el “marketing” que, más o menos, le dicen: “¿Cuántos aspirantes quiere colocar?”. Tantos”, le contesta el partido y el técnico en campañas le dice: “Eso cuesta tantos millones. Ahora, si quiere un resultado más ramploncillo, tenemos aquí unas campañitas para partidos menos pudientes, que quedan muy bien, pero, claro, no es una campaña de lujo”.
En fin, que como lo cuenta mi amigo el entendido, las campañas no las hacen ni los partidos ni las ideologías, sino los técnicos en estas cosas, con lo que la uniformidad de lo que dicen todos, sirve para unos y para otros y las diferencias la da el dinero empleado en ellas. No sé si las cosas son así o no, pero si lo son, a mí me producen una gran desilusión y tristeza, porque la campaña la ganará “don dinero”.
Diario HOY, 9 de junio de 1987

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.