Aparte de que la ciudad, durante estos días, viene apareciendo
inundada de pintadas en cualquier pared, tapia y monumento, nos ha llamado la
atención una pintada hecha en la peana o podio que sustenta el flamante caballo
y estatua de Hernán Cortés, en la que se pone simplemente la palabra “asesino”, suponiéndonos que el pintos
habrá querido referirse a la labor, que ya es historia de España y del mundo,
realizada en vida por ese personaje que fue paisano nuestro, Fernando Cortés,
natural de Medellín, que con poco más de 500 españoles (de su época, no
olvidemos el dato) logró conquistar lo que entonces se llamaba el territorio del Anáhuac y ahora se
llama México. No sé yo si achacar a ignorancia del embadurnador esta salida histórica
de tono, o bien a la mentalización que están consiguiendo algunas de nuestras actuales
autoridades que, desde su pequeñez o ignorancia enciclopédicas, están logrando
en parte de nuestra juventud una mentalización torcida hacia la leyenda negra
antiespañola que , dicho sea de paso, es una cuestión desfasada en el mundo, en
la que no cree nadie —ni aún los extranjeros que la inventaron— pero siguen
creyendo muchos de los ignorantes que ahora tenemos de “prebostes”.
Como posiblemente el valor de un paisano, por español, es menos valor,
recomiendo a quienes duden de la personalidad universal y positiva de los
conquistadores extremeños, que lean al periodista y escritor americano Carlos
Fietcher Lummis, sobre todo en su obra “Los
exploradores españoles del siglo XVI”, en la que aparte de hacer una
reivindicación de los conquistadores españoles, dice que la España de aquel
entonces dio al menos dos generales de la categoría de Julio César, Hernán
Cortes y Pizarro, y de la categoría de Napoleón dio centenares de ellos, que
por lo numerosos no son casi tenidos en cuenta.
Esto lo dicen los de fuera, por lo que tiene mayor valor, lo otro es
una simpleza obsoleta de gentes que no están al día. No creo que el pintor o
embadurnador actual, salvando las diferencias, llegue a la categoría de ese
conquistador, al que él llama asesino.
Diario HOY, 19 de marzo de 1987
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.