“La Administración nos viene
dorando la píldora para acabar subiéndonoslo todo”, me decía ayer un
cacereño, como tantos otros, asustado por las anunciadas subidas, unas
aprobadas ya y otras a punto de estarlo. “Pero
al menos nos han dejado quieto de momento el precio de la gasolina, lo que es
de agradecer”, le argumentaba. “Nada
de eso —me respondió— lo que pasa es
que les ha dado vergüenza de subirnos la gasolina cuando todo el mundo sabe que
la nuestra es la más cara de Europa”, y volvió a darme el argumento que
hemos dado y que ustedes conocen que es que, aunque en Francia e Italia
aparentemente el precio es más caro, la “súper”
suya tiene más octanaje que la nuestra (98 la francesa y 99 la italiana,
mientras que la nuestra tiene sólo 96), con lo que resulta más cara.
Pero de todos modos, ni él ni yo creemos en la vergüenza de la Administración
socialista, que es muy descarada para la subida —de lo que sea—, mientras no
les afecta a los instalados, que son ellos porque si hubiera que apretarse el
cinturón por ahorro deberían comenzar con la utilización de los aviones “mystere”, que usan los miembros del
gobierno y los prebostes que nos mandan a troche y moche, y en los que una hora
de vuelo cuesta 188.061 pesetas (como le han respondido a Serrano Pino), 64,493
pesetas para combustible, 110.488 para mantenimiento y 13.080 para gastos de
personal —que es el que menos cobra—. Como verán estos “altos vuelos” de nuestra Administración lo tenemos que mantener
entre todos y nos subirán la gasolina y lo que sea, porque ellos no van a
viajar en coche y menos particular, con lo cara que está la gasolina.
En fin, que lo que de la no subida de la gasolina ha sido sólo una
moratoria que posiblemente dejarán para la “cuesta
de febrero” porque la de enero ya nos la han puesto bien pina.
Diario HOY, 15 de enero de 1985
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