martes, 15 de agosto de 2017

Políticos “fugatis”


Cuando yo era niño y me fugaba una clase, mi padre que era el que pagaba el colegio, se veía en la obligación de tirarme de las orejas Por ello, me van a permitir que como ciudadano que pago parte del “colegio” a nuestros políticos, sea yo el que hoy les tire de las orejas para “hacer novillos” sin contar con nosotros… “¡Y ojo con rechistar (como me decía mi padre) que aquí el que paga soy yo!”
Pues bien, viene esto a cuento de las ausencias de nuestros hombres de la política de las reuniones a las que les obliga a asistir su cargo y por las que cobran sueldos que les pagamos todos.
Creo que entre los más faltones, o “fugatis”, se cuentan los de UCD; los del PSOE también faltan, aunque menos, y cuanto más a la izquierda nos vayamos las faltas disminuyen porque, al parecer, esos partidos tienen disciplina más estricta.
Me han llegado a decir que en el PCE al que falta a un pleno le obliga a escuchar, durante una hora, “Los pajaritos”, aunque yo no paso a creerlo por eso de los derechos humanos, etc.
Se dice que UCD, el partido del Gobierno, se opone a que se televisen las reuniones del Parlamento, porque las ausencias de sus político son francamente llamativas y mayores que lo eran en la época de Franco… y ahora cobran.
Así les meten, en las votaciones, los “goles” que les mete la oposición, más disciplinada y asidua.
Ciñéndonos a nuestra parcela, diremos que en la Diputación, por ausencias de ucedistas, salieron adelante algunos asuntos que no debieron haber salido. Por no ir más lejos ahí tienen el último pleno municipal, don Felipe Romero votó una vez y, suponiendo ya había cumplido, se ausentó cuando había más votaciones que hacer; don Agustín Ramos, también ucedista, aunque asiste, se equivoca y vota con la izquierda por falta de entrenamiento.
En fin, que gracias a las ausencias y despistes del PSOE salen adelante los asuntos ucedistas y porque, a decir verdad, son los de UCD los que “hacen más novillos” y no hay derecho, ya que se les paga.
Diario HOY, 15 de mayo de 1982

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