El Ayuntamiento y dos libros excepcionales

El catedrático del antiguo Instituto de Cáceres, fallecido ya, don Agustín Bravo, al que los alumnos de entonces llamábamos “El Mona” por su raro físico, tenía fama de sabio y tengo que decir, ya que le traté posteriormente, que esa sapiencia corría pareja con su fealdad y aún la superaba, aunque su forma original de conducirse en las clases le crearan una fama de desequilibrado, que pienso yo era más que nada “pose” por imitación a Unamuno del que él se consideraba alumno, que por verdadera locura.

Son incontables las anécdotas que de él se cuentan y alguna vez las contaremos, aunque hoy vamos a referirnos a su juicio crítico sobre un libro que él consideraba excepcional, y del que actualmente no existe un solo ejemplar en Cáceres.

Se trata del libro de Publio Hurtado titulado: “Ayuntamiento y Familias cacerenses”, editado por nuestro Ayuntamiento el 18 de mayo de 1915, siendo alcalde de Cáceres don Jacinto Carvajal.

Don Agustín decía de este libro que era una publicación única ya que, aun considerando algunos errores del mismo, no existe en ciudad alguna un libro que, además de recoger de forma amena toda la historia de su Ayuntamiento, recoja también la historia de todas las familias que formaron el municipio, desde su fundación a nuestros días.

Me ha suscitado este recuerdo otro libro, recién editado también por nuestro Ayuntamiento, que pienso yo —y el tiempo habrá de decirlo— que es excepcional, como es el de Juan Ramón  Marchena, “Cáceres en el pasado”, donde se recogen imágenes vividas en Cáceres desde 150 años a nuestros días. Mucho se ha hablado y se ha escrito del mismo y no vamos a volver sobre ellos, sino a decir sólo que en dos ocasiones nuestro ayuntamiento ha tenido el acierto de patrocinar dos libros únicos, como son ese de Publio Hurtado y este de Juan Ramón Marchena, que inciden en la vida de la ciudad de dos formas distintas uno con la literatura escrita de la historia de ella y otro con la “literatura” de la imagen, desde que la fotografía fue inventada.

Diario HOY, 8 de octubre de 1983